Miguel, "el fondista"


Habitación dedicada a D. Miguel Erro-508




No, Miguel Erro no es famoso. No ha escrito libros, ni ha recibido premios, ni tan siquiera era muy conocido más allá de las fronteras locales. Pero sí que dentro de la amplia historia del Gran Hotel La Perla es un personaje importante, no en vano él y su esposa, Teresa Graz, fueron quienes fundaron La Perla un 5 de junio de 1881.


Abrió aquél matrimonio una fonda en medio de una gran competencia; y Miguel Erro y su esposa, con su profesionalidad, supieron hacerse hueco rápidamente, ocupando de inmediato la Fonda La Perla un puesto de honor. Miguel Erro, a quien la prensa local le conocía con el sobrenombre de “el fondista”, supo ganarse la confianza de la Casa Real, y en concreto de Alfonso XII.




La epidemia de cólera de 1885 permitió que la ciudad supiese del carácter de Miguel Erro. Mientras Pamplona cerraba sus puertas, y mientras las otras fondas hacían lo mismo con los viajeros, Miguel no quiso dejar a nadie sin cama ni comida, ni tan siquiera a los propios coléricos a quienes atendió y sirvió personalmente en el hospital.

Su muerte a causa del cólera en el balneario de Betelu (regentado por La Perla), el 31 de julio de 1885, forzó a Alfonso XII a suspender su visita a este balneario, programada para el día siguiente. No sospechaba entonces el monarca que ya sus días estaban contados.