Conozca las fiestas de San Fermín de forma única

Disfrute de la emoción de la fiesta desde el centro de la ciudad

Habitaciones Históricas

Estancias dedicadas a personajes como Víctor Eusa, Hemingway, Pablo Sarasate, Orson Welles o Manolete

Suite 201 Hemingway

El mejor embajador de las fiestas de San Fermín cuenta con una Suite personalizada que se conserva tal y como él la conoció.

El placer de un buen desayuno servido en mesa

Empezar el día con calma y tranquilidad es un lujo

El Salón La Perla

Podrá descansar y disfrutar de la colección de libros firmados por nuestros huéspedes

Mostrando entradas con la etiqueta toreo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta toreo. Mostrar todas las entradas

Un vestido de luces en la escalera


Sobre una silla de enea, un vestido de luces. Y no es una silla cualquiera. Como casi todos los objetos y elementos decorativos de este hotel, tienen su historia y esta silla no iba a ser menos. Como bien sabéis las hermanas Guerendiain, conocidas popularmente como "Las Pocholas", fueron todo un referente de arte culinario y cosecharon innumerables reconocimientos y éxitos a nivel nacional. Pues bien, Josefina (a la que dedicamos una entrada especial en este blog) y Conchita, decidieron donar al hotel cuatro sillas, tres de las cuales se encuentran en el Salón La Perla y la cuarta, silla que corresponde a la mesa en donde Hemingway comía en "Las Pocholas",  disfruta hoy del privilegio de lucir y acoger este precioso traje de luces en color turquesa y dorado. 

Nuestra historia está muy ligada al mundo taurino y sus grandes figuras atraídas por las fiestas de San Fermín. Desde el SXIX nos han visitado matadores como: Rafael Molina "Lagartijo", Salvador Sánchez "Frascuelo", Luis Mazzantini "Gallito", Francisco Arjona Reyes "Currito", Fernando Gómez "Gallito Chico", Valentín Martín "Guerrita, Ricardo Torres "Bombita"(el Papa de la tauromaquia), José Gómez Ortega "Joselito", Nicanor Villalta, Marcial Lalanda, Juan Belmonte, Domingo Ortega, Manuel Rodríguez "Manolete" (habitación 105), Cayetano Ordoñez, Fermín Espinosa, el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza y muchos más. 


Como homenaje a todos ellos, hemos colocado una vitrina que protegerá el vestido y permitirá que se cuelen las miradas de unos y de otros disfrutando de su belleza. Nos lo encontraremos en el el primer piso, elevado sobre una peana de madera, en la parte central de las escaleras. 


Agradecemos especialmente a Carlos Olivar, Angel Gómez, Santiago Oscoz y Eduardo Urdiroz, de la Cristalería For,  su profesionalidad y buen trabajo. 











Joselito y Belmonte. Una revolución complementaria

Hoy os queremos hablar de la exposición “Joselito y Belmonte. Una revolución complementaria”. Obras de arte, piezas de gran valor familiar, textos inéditos e imágenes desconocidas que trascienden las fronteras y reflejan la identidad de nuestra cultura española. Dos toreros sevillanos, Joselito y Belmonte unidos en esta exposición con motivo del centenario de las alternativas de ambos. Gracias a la iniciativa, el visitante podrá disfrutar de cerca de la aportación estética y arte revolucionario de este nuevo concepto del toreo y sobre todo podrán entender en su conjunto la verdadera dimensión de la Edad de Oro del Toreo.  Se trasladarán al pasado de la ciudad de Sevilla en un viaje intenso en el que se emocionarán de la mano de dos grandes matadores de la Fiesta de los toros, cuyas aportaciones elevaron el toreo a la categoría de arte.


El 16 de octubre se inauguró esta exposición ubicada en el Espacio Santa Clara en Sevilla. También, en el corazón de Triana, el Castillo de San Jorge abrió para explicar y realzar la vinculación de Juan Belmonte con su barrio de adopción. Hasta el 15 de diciembre podréis ver de forma inédita dos cuadros de Zuloaga sobre Belmonte, además de obras de Martínez de León, Roberto Domingo, Luis Sanguino, Benlliure o Ruano Llopis, entre otros artistas plásticos. También monteras, capotes de paseo, carteles y hasta la pistola 'Luger' del calibre 6,35 con la que Belmonte puso fin a su vida, expuesta junto al chaleco de luces que lucía Joselito el día de su muerte en Talavera.

¡Todo un lujo poder sumergirse en un pasado que ha marcado tanto nuestro presente y la realidad del toreo moderno!



Os invitamos a ver este precioso vídeo sobre los dos toreros y la exposición:

Como muchos sabéis Juan Belmonte estuvo en varias ocasiones en Pamplona y siempre se hospedó en el Hotel La Perla, en donde coincidió muchas veces con su buen amigo el pintor Ignacio Zuloaga.



Hoy le rendimos homenaje con una habitación histórica(103) que lleva su nombre. Un panel con la plaza de toros de fondo sobre el libro de registro de clientes del hotel nos recuerda una de las fechas en las que se hospedó.


Decidimos reservar un espacio tan especial, para sus admiradores y todos los amantes del toreo, como lo es esta habitación con un balcón cuyas vistas dan la calle Estafeta, lugar donde corren los toros durante las fiestas de San Fermín y mejor se puede apreciar la belleza del toro bravo camino de la plaza de toros. Y es que, no podía ser de otra manera.







Humberto Parra, la emoción de pintar toreando

La pintura y el toreo son dos expresiones artísticas que pueden llegar a emocionar y a transmitir muchísimo, pero que no pueden estar mejor ensambladas entre sí que cuando Humberto Parra se propone comunicar a través de ellas. Un torero pintor, un pintor torero...en definitiva, una persona que puede explicarnos a la perfección lo que significa el arte del toreo a través de su mirada y las pinceladas impresionistas de su obra. Nos encanta observar y disfrutar día a día el cuadro "Noche de toros blancos de Osborne" que fue pintado en el año 1982 por el artista en el Puerto de Santa María. Todo un privilegio que hoy queremos compartir con vosotros, porque consideramos que no se puede pasar por la vida sin conocer y admirar ciertas cosas que merecen la pena; y esta es una de ellas. 

Toro "Chulón"-Paco Ojeda

HUMBERTO EGOAVIL PARRA


*Fecha de Nacimiento: 10 de mayo de 1960 en el Balneario de Barranco (Lima-Perú)
*Mayor de 5 hermanos
*Tomó la alternativa en Perú
*Llegó a España en febrero de 1983 con 1.700 pesetas
*Vivió en Jerez y actualmente vive en el Puerto de Santa María
*Facebook: Humberto Parra


LOS ORÍGENES DE UN TORERO PINTOR
Es curioso ver cómo la pintura y el toreo siempre fueron de la mano en la vida de Humberto Parra. Desde su infancia y en el inicio de sus estudios la vida le llevaría hacia el mundo artístico. Se preparó para acceder a la Facultad de Medicina en la Universidad de San Marcos, pero su camino era otro bien distinto, el que encontró  en la Escuela Nacional de Bellas Artes limeña donde centró sus estudios en la escultura, cerámica, dibujo y pintura, lugar en el que comenzó a desarrollar de forma profesional su talento. Todo ello lo compaginaría con su interés y afición por el mundo del toro que se despertó en él cuando era niño, a pesar de proceder de una familia sin antecedentes taurinos. De camino al colegio siempre pasaba por delante de la Plaza de Acho y un buen día vio al matador de toros peruano triunfar en la plaza y alzarse con el "Escapulario de Oro del Señor de los Milagros" y fue entonces cuando decidió apostar por la profesión taurina. Sabía que no sería fácil compaginar estudios universitarios con el mundo del toro, pero las novilladas le ayudarían a costearse los estudios universitarios y no quiso renunciar a ellos. 

Humberto toreando en la Pre-Feria de Acho (Lima-Perú) en 1981
Humberto toreando en la Pre-Feria de Acho (Lima-Perú) en 1982
Llegó a tomar la alternativa en Cajamarca (Perú) junto a Rafael Puga y el ecuatoriano Edgar Peña-Herrera. Pero esa misma noche decidió cambiar de rumbo y viajar a España. Al llegar a Madrid se dio cuenta de que su sitio estaba en el sur. Estuvo en Jerez y más tarde viviría en el Puerto de Santa María, llegándose a sentir un portuense más. Un día se enteró que estaba el torero Jose Mari Manzanares de tentadero en Medina y fue a hablar con él. Le ayudaron en sus inicios tanto el como su padre, Pepe Manzanares. Los tiempos fueron complicados. Siempre mantuvo clara la diferencia entre el toreo y la pintura. Era consciente de que podría haber toreado más a cambio de cuadros, pero no le pareció bien este camino porque sabía además que provocaría confusión en la gente. Más adelante, decidiría retirarse de los ruedos, pero sin dejarlos de lado, ya que a través de su pintura transmitiría toda su esencia en pinceladas vibrantes llenas de color, movimiento y emoción.

Humberto Parra en Jandilla, con José Mari Manzanares

SUS PALABRAS

El arte del esfuerzo y el trabajo
"Como toda profesión artística, la suerte influye bastante, pero lo que influye más es el trabajo. De nada sirve tener un don y no trabajarlo, no cultivarlo, no educarlo"
El Puerto de Santa María...
“a mí me parecía un trozo de la Lima colonial, de esa Lima cuadrada que le encantaba a la cantautora y folclorista peruana Chabuca Granda. Casas Palacio, parques, calles estrechas y el mar muy cerca. Y una gente con un sentido común especial de la vida y del vivir”
La Alternativa
Decidí renunciar a la alternativa, porque mi  ilusión era torear en España y de matador de toros sería más difícil y complicado que de novillero


Humberto Parra, exponiendo sus obras en Bilbao el año 2010
¿CÓMO ES SU OBRA?
"Su obra no podía ser más que impresionista, como impresionista es la mirada del torero en la arena: esa mirada sabia y profunda que atisba y mezcla con rapidez en su retina el menor gesto o el más insospechado movimiento de un toro, de un peón de la cuadrilla, el aire de un capotazo o la colocación de un picador. Y todo a borbotones, a golpes de color y de sombra, con el matiz tembloroso de la tensión de la lidia.

Hay en su obra genérica, menos personalizada en momentos de tal o cual figura, matices de tanto relieve estético como técnico -de técnica de toreo- que también denuncian la autoría de un matador. Sobre todo en el toro, ese toro de bravura soñada que mira descolgado y fijo al banderillero, anunciando un próximo galope de nobleza. O en el escorzo de la poderosa anatomía de un cuatreño metiendo los riñones bajo el peto, con la entrega que desearía cualquier ganadero. Y hay técnica en el andar pausado del banderillero que se enfrontila con pureza a su oponente. Y en la mano izquierda de un picador que se despega de la silla o que levanta el palo ofreciendo los pechos del caballo.

Y es que Humberto Parra torea cuando pinta, haciendo un guiño al profesional y al buen aficionado para que vean en sus cuadros no un frío y fijo momento escultórico sino una lidia total; para que se comprenda el momento, sí, pero también su antes y su después, sus porqués, en ese pintar sin pintar la arrancada lejana de un toro ya metido en el caballo, o el inmediato galope de ese burraco que adelanta el hocico ante la que será provocadora pisada del peón en el terreno oportuno."

Reflexión extraída que el comentarista taurino Paco Aguado hace en esta web

Desde aquí queremos transmitir nuestra más sincera enhorabuena a Humberto Parra por todo el éxito que está teniendo su obra, que no se debe a otra cosa más que a su trabajo y constancia por hacer brillar su talento.