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El Gran Hotel
Del primitivo edificio de Estafeta, que se
correspondería con los números 24 y 26 de esa calle, hay un elemento cuya
presencia en ese emplazamiento supera, con seguridad, los 200 años. Se trata
del escudo de armas, en piedra, que se conserva en la entreplanta. Tanto este
escudo de piedra como las fachadas de la Plaza del Castillo y de la calle Chapitela son
elementos arquitectónicos protegidos por ley.
El escudo, tocado con yelmo que mira hacia la
izquierda, exhibe dentro de un espacio ovalado, dos animales indefinidos,
aparentemente un cánido y un león (oficialmente un leopardo); todo ello rodeado
de decoraciones vegetales. Es una piedra armera de claro estilo neoclásico.
Estas armas, la mitad de ellas para ser
exactos, corresponden a los Larroder, cuya ejecutoria de hidalguía fue obtenida
en 1782 por Pedro José de Larroder y Pauca, como originario del castillo y casa
fuerte de Araux, en el Bearne.
Esta rama familiar llega a Pamplona a través
de Francisca Ramona de Larroder y de su marido Juan Pedro Daguerre e Ibarrondo,
comerciante de origen francés que obtuvo sentencia de hidalguía en 1807 como
descendiente de la casa Daguerre de San Martín, en Francia. Hijos de este
matrimonio fueron Juan Pedro, Pedro Antonio, María Dolores, Julián María,
Anselmo, Respecio María, e Hilarión María Daguerre Larroder.
La otra mitad del escudo, pues es escudo
compartido, corresponde al linaje de los Daguerre. Sépase que este mismo escudo figuró también
en una sepultura en la desaparecida iglesia de la Merced.