Famoso y moroso

HABITACIÓN 104 


La cinematografía y La Perla han sido en las últimas décadas, al menos desde mediados del siglo XX, un binomio indisoluble. Y dentro del panorama cinematográfico, en el que actores, directores de cine, productores, y platós se entremezclan caprichosamente, hay un personaje, cliente del hotel en los años cincuenta y sesenta del siglo XX, que brilla con luz propia. Se trata del actor y director de cine Orson Welles.



Se le recuerda por su afición a la cerveza, consumiendo varias de ellas en el restaurante del hotel en cada comida o cena. Se le recuerda también por la estridencia de sus carcajadas, que hacían silenciar al resto de comensales. Pero sobre todo se le recuerda porque en su última estancia en el hotel, después de varios días de alojamiento y de opíparas comidas, abandonó el hotel discretamente, de puntillas, ¡sin pagar!. Un olvido tonto.


Siempre hemos pensado, durante décadas, que quedaba pendiente esta deuda; sin embargo, es de justicia decirlo, que en la entrevista realizada a un antiguo trabajador del hotel, pudimos llegar a saber que el moroso llegó a pagar su deuda… casi dos años después.