El 16 de agosto de 1902 el rey Alfonso XIII visitaba por vez
primera la ciudad de Pamplona. El día anterior llegaban a la ciudad los
Ministros de Estado y de la Guerra, a quienes el Gobierno Civil alojó en el
Hotel La Perla. Con el mismo motivo se desplazó a Pamplona ese mismo día el
Capitán General don Arsenio Linares Pombo, alojado también en La Perla, en
donde recibió la visita de las autoridades civiles y militares. El día 16 se
alojó en el hotel una comisión del Ayuntamiento de Zaragoza, presidida por su
alcalde interino don Antonio Miranda, que iba acompañado de los concejales
Ricardo Iranzo y Enrique Armisén, quienes se desplazaban a Pamplona para
invitar formalmente al rey a visitar la capital aragonesa durante las fiestas
en honor a la Virgen del Pilar. La factura de su estancia, que ascendía a 548
pesetas, fue abonada por el Ayuntamiento de Pamplona.
El monarca estuvo cuatro días en Navarra, alojado en el Palacio
de Diputación. El día 19 subió a visitar las obras del fuerte Alfonso XII, en
la cima del denominado monte de San Cristóbal (Ezkaba), en donde el Hotel La
Perla se ocupó de servir la comida, tal y como venía haciendo en varios
momentos de la regia visita, principalmente en los banquetes que se sirvieron en
el palacio de Diputación.
Navarra entera, y con ella la ciudad de Pamplona, conmemoró en
1912 el séptimo centenario de la batalla de las Navas de Tolosa. Con tal
motivo, para participar en la solemnidad de estos actos, acudió a Pamplona el
rey Alfonso XIII el 16 de julio.
En la misma esquina del hotel, ocupando el ancho de la calle
Chapitela, y bajo la dirección del arquitecto José Yárnoz, se colocó en su
honor un “arco de triunfo”, erigido por la Cámara de Comercio. El Hotel La
Perla iluminó su fachada para la ocasión.
El 14 de julio llegaban al hotel varios jefes de la escolta real
del monarca, utilizando este establecimiento como alojamiento y como base de
operaciones desde donde se coordinó toda la seguridad de la visita real. Al día
siguiente, día 15, era el Ministro de Fomento, señor Villanueva, quien ocupaba
una de las habitaciones del hotel. En los días previos lo había hecho el
Director General de Agricultura, don Texifonte Gallego.
El día 16, que es cuando llegó Alfonso XIII, se celebró un banquete
oficial en el Palacio de Diputación, servido por el Hotel La Perla. En el menú
figuraban: Entremeses, Consomé a la Reina, Salmón a la moscovita, Filete
medrado en salsa, Peregueux, Jamón de Joskal aspia, Espárragos en salsa
holandesa, Capones asados, Ensaladas rusas, Helados de vainilla y fresa,
Pastas-moka, Postres varios, Café y licores.
La mañana del día 17, antes de asistir el monarca al Congreso de
Viticultura, se desplazó desde el Palacio de Diputación, que es donde se alojó,
hasta el Hotel La Perla en donde se le sirvió el desayuno, y en donde aprovechó
para agradecer al servicio de cocina su trabajo. Para este aperitivo el hotel
estrenó una vajilla hecha para ese momento, en la que aparecía el escudo de
Navarra. En la recepción del establecimiento se colocó un artístico buzón de
madera que representaba también las armas del viejo Reino.